Bajo la luz de la luna, me estremezco de sentimiento ante su música, vuela mi imaginación hedonista y saltan lágrimas de melancolía...Añades el mar Mediterráneo en base de guitarra y acordeón; y sólo te queda ver que cuando el folk sorprende la música, el ritmo vibra al jazz, y piazzolla abre el cofre de las esencias para rememorar la melancolía del tango rasgada por la electrónica, el escuchar Chin Chin versionado es el mejor posible deleite.
2 comentarios:
Curioso Blog de poeta cuántico.¿Y romántico?pero acaso existió o existe el romanticismo.
Sólo existe en los ojos de quien mira.
Mira la noche estrellada. Es una estrella de noche. El cuadro de la portada. estrellas tras-nochadas, atómos inmensos, micro universos fulgurantes.
A veces también rostros. Y lugares.
Y recuerdos.
Como dice una amiga, "todo me parece ayer".
Quizás simplemente el romanticismo esté en esa mirada a un ayer; en una lágrima seca que aún palpita.
(Leyendo a Mary Shelley)
Me voy corriendo a ver Caótica Ana.
Saludos
Gracias por tus interesantes comentarios. Espero que tus ricas palabras no sean la última vez que aparecen por estos lares.
Y sobre el romanticismo, no es el debate sobre mi propia existencia, sino la cualidad sentimental, generosa y soñadora de mis propias vivencias que reflejan esa añoranza tan propia de la melancolía argentina.
Y espero una reflexión tan profunda cuando hayas visto Cáotica Ana.
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