Me encontraba en un comedor de un piso con cinco o seis personas, de las cuales sólo conocía a Psyché y a su pareja. El ambiente estaba animado aunque la citada habitación tenía aires de madera antigua y carcomida.
En un momento determinado, sin explicación aparente, salí del comedor con intención de coger algo, y me presenté en uno de las dormitorios de la casa, donde había una vista maravillosa: era un bosque infinito, lleno de cedros que rebosaban vida y fuerza con un color verde tan vivo, ante un cielo azul vibrante sin nubes que ocultaran su inmensidad.
Estaba tan impresionado por lo que había visto, que sólo pensé en llamar a Psyché para que viniera y contemplara ese especial paraíso, porque sabía que lo apreciaría tanto como yo lo estaba haciendo en ese momento.
Al acercarme al salón y comentarle lo que había visto, ella vino enseguida y volvimos a la habitación. Allí, nos sentamos en una cama. Al poco rato, un hombre nos comentaba que se iba a duchar en el cuarto de baño lindante justo al dormitorio.
Mientras contemplábamos ese maravilloso bosque, yo le comentaba la belleza de éste. Y, de repente, se lanzó sobre mí y me besó profundamente. Me encontraba sorprendido por la determinación de la acción, pero, a la vez, con una felicidad inmensa. Comencé a recorrerla besándola desde su cuello, deteniéndome en sus pechos, mientras tanto mis manos como las suyas se convertían en pura armonía sensual.
Después de un rato indefinido de placer, se presentaron un chico y una mujer en la habitación, comentándonos que debíamos volver. Así que cogimos nuestras ropas, vistiéndonos rápidamente y salimos de ese pequeño paraíso.
Al cruzar el umbral de la puerta, me desperté.
En un momento determinado, sin explicación aparente, salí del comedor con intención de coger algo, y me presenté en uno de las dormitorios de la casa, donde había una vista maravillosa: era un bosque infinito, lleno de cedros que rebosaban vida y fuerza con un color verde tan vivo, ante un cielo azul vibrante sin nubes que ocultaran su inmensidad.
Estaba tan impresionado por lo que había visto, que sólo pensé en llamar a Psyché para que viniera y contemplara ese especial paraíso, porque sabía que lo apreciaría tanto como yo lo estaba haciendo en ese momento.
Al acercarme al salón y comentarle lo que había visto, ella vino enseguida y volvimos a la habitación. Allí, nos sentamos en una cama. Al poco rato, un hombre nos comentaba que se iba a duchar en el cuarto de baño lindante justo al dormitorio.
Mientras contemplábamos ese maravilloso bosque, yo le comentaba la belleza de éste. Y, de repente, se lanzó sobre mí y me besó profundamente. Me encontraba sorprendido por la determinación de la acción, pero, a la vez, con una felicidad inmensa. Comencé a recorrerla besándola desde su cuello, deteniéndome en sus pechos, mientras tanto mis manos como las suyas se convertían en pura armonía sensual.
Después de un rato indefinido de placer, se presentaron un chico y una mujer en la habitación, comentándonos que debíamos volver. Así que cogimos nuestras ropas, vistiéndonos rápidamente y salimos de ese pequeño paraíso.
Al cruzar el umbral de la puerta, me desperté.
¿Alguien me puede dar una explicación a mi sueño? Agradecí profundamente los comentarios la otra vez que planteé un sueño por estos lares.
4 comentarios:
vaya, pues no tengo ni idea. Tiene que significar algo??
Dicen que los sueños representan nuestro inconsciente, y que éste se puede interpretar.
Yo, una de las razones de describir este sueño, es por la felicidad que me transmitió al despertarme, que curiosamente, siguió hasta que me volví a acostar. :)
Hablando de incosciente... y del contenido de dicho sueño... si recurrimos a Freud el sentido es claro:
"Necesitas sexo"
Bueno... para Freud cualquier cosa indicaba que...
"Necesitas sexo", (en grandes cantidades)
Nada, fuera bromas...
Lo de cambiar de habitación y el mágico bosque puede expresar unas tremendas ganas de hacer un viaje... ¿hay algún lugar al que desees ir con todas las ganas del mundo y no puedas?
Un saludo!
PD: Sexooo!
Justamente, sobre la pregunta última, la has clavado. Gracias, porque efectivamente tenía planeado un viaje que al final, no voy a poder hacer. :(
Sobre la primera cuestión: ¿hay algún ser humano en la Tierra que no necesite sexo? ;)
Kunshi, estás invitado, cuando quieras, a hacer más interesantes comentarios.
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