Bitxi zuri

Me quedo recordando el instante fugaz en que el tiempo se abría. Me recomendaste una película, como un cuento de hadas, descubriste un sendero nuevo de experiencias a revivir. Era un reflejo, era un capítulo de la ciencia de los sueños. Y me atreví.

Quiero conocer más cosas de tí, quiero volver a sorprenderme por un guiño escondido tras el cristal de la belleza, quiero vibrar con el presente de verdades y colores, quiero asombrarme tras la luz de la esperanza.

Todo se convierte en polvo de estrellas, el tiempo hace fugaz la transposición de los sentimientos, y los deberes de un niño doctorándose tras las canciones de Nacho Vegas dilatan un tiempo que no tiene sentido ninguno en mi realidad.

La Sombra del Viento me acompaña por las noches, y tu recuerdo a través de tus palabras me han permitido acariciar los visos detrás de un presente de tormentas que tienen que pasar para alcanzar de nuevo el sol. Pero la visión es de un amanecer lindo, comienzo de un camino que aunque no se transite ahora, siempre quedará abierto para conocer lo que hay tras la montaña en la que guarda paciente el mar de los deseos.

Zuri esker, bitxi zuri!

P.d. Disculpen las faltas de ortografía en euskera

Diario de un FIBer: 3 - Pérdida de libreta

La música, mi compañera eterna, mi inspiración imposible, mis palabras resvalándose entre emociones, mis pasos locos entre la gente, lágrima cayendo entre aquello que no pudo ser, sueños esfumados en un instante, burbujas de jabón iluminando el cielo, mi pérdida de conciencia con Dapunto Beat, mi relajación con El Hijo, mi encuentro con sombreros taiwaneses y un indio, mis bailes hasta el amanecer, mi descubrimiento de las bellezas del paraíso, mi desfallecimiento, muerte y resurgimiento, mi danza lujuriosa, mi felicidad ingenua, mi ensimismamiento con el dios Leonard Cohen, mi sonrisa con Micah P. Hinson, y mi cuento en un devaneo del concierto de Morente Omega con Lagartija Nick: me acerqué a la sesión de José María Rey donde vi una bailarina con un mensaje en su camiseta de voluntaria "Ask me...", bailé con ella un hit del 2008 y aunque me dijo donde encontrarla, llegué tarde y la perdí, como días más tarde perdí mi libreta. Se acabó el FIB 2008.

Diario de un FIBer - 2: Jueves aka "Clara"

Aldo Linares: Dejo que las horas caminen, el tiempo es un compañero distante, me convierto en el lobo de Hesse, un cowboy desfasado, un maquinista a la espera de un tren llamado respuesta, ausente en la definición,...
Crea una adivinanza y una pista que te guíe, alguien que te acompañe, esa chica entre 18.000 que te vuelva a ver, que vaya girando la música, y sin pensar, deja las horas correr, mover, colocar, dibujar, soñar,...

Krakovia: Buen aperitivo. Rock de 45 minutos, un poco de acción alemana, descarga de adrenalina, música constante, ritmo, y para acabar mezcla de cuchillos, niños y sangre. Podría ser una buena banda sonora para películas de David Lynch.

Y llegó el descontrol y la acción, la música iba cargando mis venas de energía. Iba trasladándome a otro nivel. Llegó el buen hacer de Nada Surf y los saltos empezaban a acompañar el anochecer... Una noche en que la luna acompañaba ligera para poder disfrutar del piar de Single y sus vestidos, música dulce para hacer boca a la gran actuación de la noche: Sigur Rós. Puesta en escena impresionante!!!! Sonidos puros, esencia del postmodernismo, toques retros, reinventando la forma de expresar el post-rock... Y como postre de esta deliciosa cena...un concierto para recordar también, por su música, por su encanto, por el baile, por el estado de trance: Facto Delafé y las Flores Azules: "Gigantes instantes!!!"

Me decían que el jueves era el día más tranquilo del FIB este año... Si sigue in crescendo, no sé cómo puede ser el domingo. Os lo seguiré contando ;)

Diario de un FIBer - 1: Voluntariado

En un día nublado donde la gente llena
de lenguas extranjeras, creencias y cerveza
el dibujo de una playa serena
consciente de que todo sólo es presente.

El día del voluntariado del FIB ha estado marcado por masajes, Reiki, Esther, Ruth, Mar, Alba y por todos aquellos fiberas que iban dirigiéndose a autobuses infinitos... cuyas miradas a veces se cruzaban con la mía, de quienes quizás haya alguien que se acuerde, y hoy esté hablando sobre mis manos. Y entre toda esa marabunda de gente inglesa, alemana, sueca, española, canadiense, francesa, italiana, portuguesa, la seducción de una chica fumando, que perversa me preguntaba si la volvería a ver...