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miércoles, septiembre 12, 2007

¿Quien dijo que nunca amanecería al atardecer?

Atardecer parisino

Sueños de papel escritos por sonrisas
billetes de viajeros marcados por la imaginación
monedas usadas por mercaderes de fantasías
canciones de trovadores con repertorios de amor

Atardeceres de astros desperezándose del sol
amaneceres donde la luna se burla del día
noches de estrellas saltarinas entre nebulosas
aurora polar alterando el norte del bien y del mal

Paseos sobre las aguas de los canales de Venize
vistas desde la cúpula del Duomo de Firenze
escaleras de cristal repintando la torre Eiffel
panorámica infernal del incendio de L'alcalatén

Y una profunda alegría por todos mis sentimientos
movimientos, sinsentidos, formalmente incorrectos
con mi arco iris, ninfa, delfín y gata, vestido de peregrino
en un verano donde mi latido encontró su camino.

miércoles, marzo 07, 2007

Salto al mar

Voy a dejar a la tierra tras de mí, tras largas jornadas contemplando el paisaje. Me voy a sumergir en el mar para contemplar el mundo desde otra perspectiva, con el ansia que la vida, me permita seguir enriqueciendo con su saber y conocimiento.

Todo que tuvo un comienzo, tiene un final, y todo aquello que nos acompaña es reversible al cabo de más o menos tiempo (a eso induce la teoría del Caos [corríjanme si me equivoco]), con lo cual sólo nos queda el presente, las ansias de futuro y nuestro subjetivos recuerdos del pasado.

Lo demás es aire, agua, tierra y fuego; átomos, quarks, leptones y spin; bits, qubits, genes y tú.